jueves, 28 de octubre de 2010

Sociedad

Pequeños parterres descuidados por el tiempo
Montañas que el tiempo a depositado en el agua
Sueños donde el viento empuja al alma
Recónditos lugares en la memoria de las princesas
Añoranza de tiempos de pureza y amor
Donde oscuras melodías no estropeaban nuestras noches

Amor perdido y romanticismo amputado del córtex
Dulce sonido metálico
Al despertar y al acostarse
Duras palabras modificadas por reproches oportunos
Seleccionando el devenir olvidamos que todo debe fluir
Los corazones en cajas de madera astillada
Espinas fuertemente hundidas en la piel
De aquellos que recordamos lo anterior
Extremidades carcomidas por los años
Dolor infinitamente reprimido
Autentico desafío a la autoridad establecida
Odiados sin motivo
De sobras conocidos
¡Somos los inmortales!

Los vasos donde tomáis vuestras copas
El aire donde depositáis vuestro humo
Tembloroso fuego que os aniquila
¡Vivid malditos!
Seguiremos trabajando para teneros a nuestros pies
Quizás en la eternidad

¡Próximamente en las peores pantallas!
Retratos de un marginado
Horrores de un deseo por cumplir
Sueños donde el viento empuja vuestros estómagos
Delirios de grandeza al fin
Por el tiempo descuidados, pequeños parterres.

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